¿Qué es Peppol?
Peppol es la red europea oficial para la facturación electrónica. Creada en 2019 para la contratación pública, está transformando la manera en que las empresas intercambian facturas en Europa, imponiendo un formato estándar, mayor seguridad y plena interoperabilidad.
La facturación en Europa está cambiando profundamente. Desde el 18 de abril de 2019, todas las administraciones públicas centrales de la Unión Europea están obligadas a aceptar facturas electrónicas conformes con la norma EN 16931. Para garantizar que todos los sistemas de facturación puedan comunicarse entre sí, la Unión Europea desplegó Peppol, una infraestructura común que hoy se ha convertido en el estándar de referencia para intercambios fiables, seguros y conformes.
1. Por qué Peppol está cambiando la facturación en Europa
Antes de Peppol cada empresa debía crear sus propias conexiones para intercambiar facturas electrónicas, a menudo en formatos distintos y no estandarizados. Esto generaba altos costes, retrasos y un riesgo significativo de errores.
Con Peppol se aplica un único estándar para todos. Este cambio permite:
-
Una facturación estructurada reconocida legalmente en toda la Unión Europea,
-
El fin de múltiples formatos incompatibles,
-
Mejor automatización y trazabilidad completa de las transacciones.
No se trata solo de una evolución técnica, sino de una transformación estructural de la facturación en la Unión Europea.
2. Cómo funciona Peppol en la práctica
-
La empresa se registra en un Access Point acreditado.
-
Obtiene un identificador único, llamado Peppol ID.
-
Emite sus facturas a través de su Access Point en el formato EN 16931.
-
La red identifica automáticamente al destinatario y entrega la factura de forma segura, trazable y conforme a la norma.
Peppol actúa así como un canal único de transmisión que conecta todos los sistemas de facturación dentro de la Unión Europea.
3. Qué cambia para las empresas
La introducción de Peppol tiene un impacto directo en todas las empresas sujetas a la facturación electrónica, tanto en el ámbito B2G (empresas que facturan a entidades públicas) como en el B2B (empresas que facturan a otras empresas).
Esto significa que:
-
Las empresas deben utilizar un sistema compatible con Peppol para facturar a determinados clientes públicos y, en muchos países, pronto también a clientes privados.
-
El formato PDF o Excel ya no será suficiente. Las facturas deberán emitirse en un formato electrónico estructurado reconocido a nivel europeo.
-
Incluso las pequeñas empresas, como las tiendas en línea, se verán afectadas en cuanto facturen a empresas o administraciones públicas.
Ejemplo práctico
Imaginemos una tienda en línea que vende productos tanto a particulares como a empresas:
-
Cuando factura a una administración pública, deberá utilizar obligatoriamente el formato Peppol para que la factura sea aceptada.
-
Cuando factura a otra empresa en un país donde la facturación electrónica B2B sea obligatoria (como en Bélgica a partir de 2026), también tendrá que usar Peppol.
-
Cuando factura a un particular, podrá seguir utilizando sus métodos actuales, ya que los particulares no están sujetos a esta obligación.
En la práctica, esto significa que incluso una pequeña empresa tendrá que adaptar su sistema de facturación para seguir siendo conforme y poder continuar facturando a sus clientes profesionales.
4. Por qué usar una herramienta de facturación compatible con Peppol marca la diferencia
Una de las grandes ventajas de Peppol es que elimina la complejidad técnica para las empresas. Sin embargo, para aprovecharlo plenamente es esencial utilizar una herramienta de facturación capaz de comunicarse directamente con la red.
Un software compatible con Peppol permite:
-
Generar facturas conformes con el formato estándar europeo sin necesidad de tratamiento manual adicional.
-
Enviar y recibir facturas directamente a través de la red Peppol.
-
Automatizar el cumplimiento legal sin tener que gestionar los aspectos técnicos.
-
Seguir en tiempo real el estado de las facturas (envío, recepción, procesamiento).
-
Asegurar los intercambios con administraciones públicas y empresas en todos los Estados miembros.
Nuestra solución, CommBilling, se inscribe en esta dinámica. Aunque actualmente está en proceso de certificación Peppol, está diseñada para integrar esta funcionalidad en cuanto se complete la validación oficial. De este modo, los usuarios podrán cumplir con los requisitos europeos sin complejidad técnica y seguir facturando a sus clientes públicos y privados con total conformidad.
Peppol no es una opción, sino el estándar europeo de la facturación electrónica. Creado en 2019 para la contratación pública, se está extendiendo progresivamente al sector privado. Esta evolución afecta tanto a grandes empresas como a pymes, autónomos y tiendas en línea, siempre que facturen a clientes profesionales.
Para los usuarios de una aplicación de facturación, adoptar una solución compatible como CommBilling permite mantenerse conformes, ganar en eficiencia y anticipar los cambios normativos que se avecinan en Europa.